Broche original.

Desde Enero he estado de prácticas como Técnico Superior en Anatomía Patológica y Citología en el Hospital Perpetuo Socorro - Materno Infantil de Badajoz, y tras seis meses, lo quieras o no, acabas cogiendo confianza con tus compañeros. Tanto es así, que un día llevé algunas de mis manualidades de fimo, y la patóloga fue clara y concisa. Me dijo que quería un broche, que lo dejaba todo a mi gusto, pero que quería que el enganche fuera grande, para su chaqueta de punto.
Y enredando, enredando...

¡Tacháááááán!

Así es como quedó.

Los detalles fueron improvisados y, como veis, muy coloridos.

Este es el broche que coloqué en la zona trasera. Muy propio para enganchar en chaquetas de punto sin que  éstas se deshagan, ¿no creéis?

¡Una de compritas!

No es ningún secreto el hecho de que me pirra ir a los chinos (bazares asiáticos si lo preferís), así que cada vez que necesito algo, me paso por allí para ver si lo tienen. En este caso me decidí por un disco Kumihimo (ya sabéis, para hacer esas pulseras que ahora tiene todo el mundo), ya que la placa plana la compré un par de días antes; y compré hilo también, que quería probar combinaciones y formas.
Y a lo tonto, a lo tonto, se me fue la mano... y así acabé.

Estas colas de ratón tienen alrededor de 5 metros por bobina y, exceptuando la última, que va cambiando de color conforme se va avanzando en metros, son todas en colores lisos.

Estas cuerdas son más anchas y plásticas, con un pequeño punteado a lo largo de toda su superficie.

Estas bobinas venían en paquetes de tres unidades y al tacto son mucho más ásperas que las anteriores. Además, para mi gusto son más complicadas de manejar, ya que las pulseras quedan más finas y se deforman con mayor facilidad.

Y por último, algunos accesorios que compré 'para probar e ir tirando'. En cuanto a los bigotillos, no pude resistirme al verlos.

Siento la mala calidad de las fotos, pero esta mañana tuve un problema con la cámara que hasta ahora no he podido arreglar por el día tan ajetreado que he tenido, y me ha tocado echarlas con la BlackBerry.

Espero que pronto podáis ver la utilidad que le doy a estos últimos accesorios.

PRÓXIMAMENTE... 

¡Tanda de pulseras!

Maxi Helado.

Que sí, que ya lo sé, que tengo un problema con los helados, ¡pero no importa! 

Este se puede utilizar como figura de decoración, ya que es bastante más grande que el resto.

¡Más pastelitos!

Con los dos que son iguales he hecho los pendientes que subido antes junto al cono de helado, con el resto, he hecho anillos, ¡y mirad cómo han quedado!

¡Un poquito de música!

Como soy una gran fanática de la música (siempre ando escuchando algo) no he podido evitar hacer algo relacionado con ella. ¡Y me encanta cómo ha quedado!

Estas dos semicorcheas se pueden utilizar como colgante si le añadimos una arandela pequeñita en una de sus esquinas, o como broche en caso de colocar tras ellas un enganche, o como pendiente si lo preferimos.

El caso es que se pueden pedir en los colores que más os gusten.

Más de lo mismo con estas corcheas, en todos los colores que queráis.

Tengo más manualidades pensadas relacionadas con la música, ¡pronto podréis verlas!

Conos de helado.

Esta mañana me dio por ponerme a hacer helados otra vez (tengo un problema con ellos, y lo admito), y esto es lo que salió. 

Podemos utilizarlos como broche colocándole detrás un enganche, como se ve en las fotografías siguientes:

O bien podemos engancharle una arandela y acoplarlo a una cadena, como hice con los otros dos.

Pendientes.

Este es el par de pendientes que hice a partir de los pastelitos de ayer.

Podemos cambiar las secciones de colores según el gusto, e incluso la guinda de arriba, o el enganche de los pendientes. Podemos añadirle algo más, o poner pedrería si los vemos muy sosos así. ¡Todo al gusto!

Bulbasaur.

Otro Pokémon que anoche se me ocurrió hacer. Tengo algunos más en mente, pero he de enfocarlos bien (y debo pedir más hamas blancos también, porque me quedé sin ellos el primer día).

Mini pastelitos.

Estos pequeños pastelitos se han acabado convirtiendo en dos pares de pendientes y un anillo. Aunque de los pendientes aún no tengo foto (pero no tardará, ya veréis), os dejo esta del anillo, para que os hagáis una idea de cómo queda y del tamaño que tiene.

Ya sabéis que siempre se puede escoger entre una amplia variedad de colores para hacer de estas creaciones algo más personal.

¡Un Charmander salvaje apareció!

En este caso, en la primera foto podemos apreciar las piezas fundidas, mientras que en la segunda (del revés) observamos perfectamente cada orificio. Yo escogería la segunda, pero lo bueno de hacer tus propias cosas es que tú eliges cómo orientarlas.

¡Heladitos! II

Será por tipos de helados... 

¡Heladitos!

Las tardes de verano son muy largas y aburridas, y a una imaginación como la mía sólo se le ocurren representaciones de comida, y como he ido al congelador y helado no tenía, he decidido hacerlo.

Las variaciones de colores van a gusto, tanto el sirope como el helado en sí se pueden combinar como mejor se quiera.

Game Boy Color.

Este es de los primeros proyectos que he hecho con los Hamas, un par de Game Boys Color a las que finalmente he añadido una arandela y un enganche para poder usarla como llavero, aunque son un poco grande, todo hay que decirlo.

En la primera foto se puede apreciar cómo hay zonas 'selladas' y otras en las que aún es visible el orificio medio, esto se debe a que el calor de la plancha actúa antes en unas zonas que otras. Se pueden sellar por completo o no. Yo soy de la opinión que cuanto menos sellado mejor, pero eso ya va al gusto.

En este caso, no podemos darle la vuelta, puesto que los botones van colocados en un único sitio, pero hay casos en los que, con darles la vuelta basta, ya que las piezas del otro lado están unidas, pero no fundidas ni selladas.

Existe la posibilidad de hacer esta manualidad en una gran variedad de colores y mezclas.

¡Llegó la revolución hama!

¡Muy buenas (y calurosas) tardes!

Por fin, después de tantísimo tiempo, vengo con nuevas manualidades, y es que hace una semana, mi buena amiga Patricia (cuyo blog podéis visitar aquí) y yo decidimos hacer un pedido que llevábamos mucho tiempo esperando: ¡¡Hama beads!!

Y digo yo que os preguntaréis qué son. Bueno, pues los hama beads no son otra cosa que tubitos de plástico que se colocan sobre una placa formando figuras, a las que después le pasas la plancha un par de veces, y el plastiquito se funde, de modo que al enfriarse obtendremos el dibujo que hemos realizado.
Hay infinidad de placas, aunque yo para empezar he cogido la cuadrada básica, que creo que es la más manejable, al igual que el tamaño de los hamas, que también escogí el mediano de entre grandes y pequeños para ver si me veía capaz de manejarlo.

He de decir que al principio pensaba que no sería sencillo, pero he sido gratamente sorprendida, ya que esta manualidad es bien facilita, y la verdad, sólo hay que fijarse bien en el lugar donde van las piezas, con lo que no da mucho lugar a error.

Por lo pronto estoy pensando en una placa redonda y en hamas minis, pero creo que acabaré haciendo grandes cosas con estos 'simples' tubitos.
Os iré enseñando algunos modelos.